‘¿Cómo se puede soportar el caos del Santa Lucía?’

Escrito por José Marín Ros. 16 de diciembre de 2016, viernes.

No puedo entender el pasotismo de gran parte dela ciudadanía de Cartagena con respecto entre otras cuestiones las relacionadas con el Servicio Murciano de Salud.

Hoy, día 16 de diciembre, a las 2.00 horas ingreso en el Hospital del Santa Lucia a mi madre, quien tras una caída, tuvo que ir a Urgencias y le diagnosticaron rotura del fémur, tras lo cual debe de ingresar en el centro para ser operada. La trasladan en la cama a un pasillo en el cual hay otras 20 camas con enfermos y acompañantes. Los acompañantes hemos estado en una dura silla entre enfermos a los que privamos de su intimidad, entorpeciendo el trabajo del personal sanitario, aguantando corrientes de aire, los olores de las defecaciones de los enfermos, el trasiego de camas en los pasillos cambiándolos de un pasillo a otro pues los enfermos que están en los pasillos donde entran y salen las ambulancias (40 enfermos) están helados de frío.

En fin, es un compendio de mala praxis que me lleva a pensar cómo podemos aguantar todo esto año tras año y día a día, soluciones seguro que las hay. ¿Cómo podemos solucionar esta nefasta gestión de los responsables políticos y sanitarios de este Servicio Murciano de Salud?

Nos alargamos en los plazos de operaciones, consultas a especialistas, no creo que los responsables del SMS lo hagan para que utilicemos cada día más la medicina privada, o tal vez sí.

Cada año parece ser que a los responsables de los hospitales y áreas de servicio les gratifican económicamente, ¿es por ahorrar en detrimento de la salud de los enfermos? ¿es un premio al que peor lo hace? Peor no se puede hacer por lo menos en Cartagena en el resto de la Comunidad no lo sé.

De lo que si doy fe es que los pasillos están llenos de enfermos, ¿cuando te toque a ti que harás? Y doy gracias al personal que hay trabaja por su buen hacer con los inconvenientes que esto les acarrea.

Señores y señoras responsables del funcionamiento del SMS, si leen estas letras tan amables que aquí digo ya que no cuento los insultos que profieren hacia ustedes los enfermos y acompañantes en esos pasillos. Aunque tal vez les de igual y yo no lo comprenda, pues yo no lo haría. Si no pueden solucionar este mal funcionamiento, váyanse… por favor.

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