El movimiento vecinal no tiene color

Escrito por Juan Gómez Ayala. Presidenta AVV Virgen Caridad. 1-06-2015.

Bien es sabido que las personal que tenemos vocación de servicio publico no nos deberíamos identificar. Deberíamos ser imparciales, no tener color político y además estar en la obligación de entenderse con el equipo de gobierno municipal de turno.

¿Que pasaría si defiendes los objetivos o planes de actuación de tu partido político que circunstancialmente está gobernando? Pues como el dicho de ‘pan para hoy y hambre para mañana’.

Uno de los principales objetivos es intentar llevar de forma responsable a buen puerto después de reunirte con tu equipo de trabajo o junta directiva y plantear un plan de trabajo marcando prioridades y ser realista a tus peticiones.

En lo que respecta a nuestra asociación de vecinos llevaremos a efecto el II Plan Director de Barrio, al haberse agotado el primero y habiéndose quedado realizado un 80 por ciento de su totalidad.

Algunos os preguntaréis qué es el Plan Director, pues no es, ni más ni menos, que el poner en valor un Plan Integral de Barrio, ver a qué concejalías compete, organismos oficiales, instituciones, entes y empresas del municipio que pudieran intervenir.

¿Y todo esto para qué? Pues muy sencillo, porque ahora vendrá un nuevo equipo de gobierno, con nuevas mentalidades, nuevos puntos de vista, ganas de trabajar conforme a sus criterios partidistas, pero, quisiera equivocarme, no tendrá claro que política municipal para el barrio quiere aplicar.

Por eso es nuestro Plan Director, le queremos facilitar lo que nuestros vecinos y vecinas queremos en nuestro barrio. Queremos un barrio modelo a nuestra imagen y semejanza. Queremos un barrio donde podamos vivir, donde nuestros hijos y nietos puedan disfrutar en los parques y jardines así como tener unos mobiliarios infantiles de calidad o al menos de uso no deteriorados o incluso carecer de los mismos.

Hacer que nuestros vecinos y vecinas tenga calidad de vida, que no dependamos del centro de la ciudad para poder subsistir, que podamos vivir en nuestro barrio, hacer lo posible para que los actos culturales que se celebran en la ciudad podamos también compartirlo en el barrio, intentar que la vida social de la ciudad se contemple en los barrios, sino en la misma magnitud, al menos unas pinceladas de las mismas, tales como carnavales, Carthagineses y Romanos, semanas de cine, premios literales, navidades etc.

Por todo ello el movimiento vecinal no tiene color.

Unicamente pedimos que independientemente el color que gobierne se nos comprenda, nos entiendan, nos reciban y hablen con nosotros que estamos al servicio púbico, somos un colectivo vecinal que lo único que nos mueve es el bien común y sobre todo, todos juntos poder contribuir al bienestar social y sobre todo construir barrio porque todos unidos, barrios y diputaciones hacemos que nuestro termino municipal sea mas agradable y sostenible.

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