¿Por qué tres y no cuatro urnas?

Escrito por Carlos Illán Ruiz. 21 de febrero de 2019, jueves.

El presidente Sánchez convocó las elecciones generales para el 28 de abril. Es una fecha como pudiera ser otra. Eso daba la sensación, pero por lo que estoy percibiendo, para muchos no ha sido la más apropiada, pues, por un lado, suspende unas oposiciones sanitarias para ese día con más de cien mil apuntados. Y por otro, aumentan las voces que, pensando en el ahorro, verían mejor que se fusionaran con los tres comicios del 26 de mayo.

Más de cien mil aspirantes repartidos por España en busca de plaza de auxiliar sanitario. De ellos, unos trece mil en la Región de Murcia. Es mucha gente. A algunos no les ha importado retrasar el día de la oposición, pero muchos sí están contrariados, pues rompen su programación de preparación y se prolonga la tensa e ilusionante espera. Es lógico ese malestar. Además, ahora se barajan tres fechas. Una corresponde a julio (San Fermín, para ser concretos) y dos a septiembre, que en el caso cartagenero es cuando más fiestas populares se celebran y también llegan Carthagineses y Romanos.

Y digo yo, ya que el 26A y el 24M están tan cerca, ¿no se podían haber unido? Lo comento desde el punto de vista social, no político. Es decir, no desde la perspectiva de los partidos políticos que todo lo estudian a partir si beneficia o no a sus intereses. Lo digo porque en menos de un mes no creo que muchos cambien de parecer en terrenos diferentes, pues la primera cita es para las elecciones generales y la del 24 de mayo son para elegir a los políticos locales, autonómicos y europeos. Si ese día, en lugar de colocar tres urnas se ponen cuatro, me pregunto: ¿No supondría un importante ahorro de personas citadas para las mesas electorales?, entre otros gastos.

Es mi opinión, pero seguro que estoy equivocado y resulta que todo está 'ferpecto'.

Imprimir

powered by social2s