¿La dama de La Alcudia?
Fue un descubrimiento casual y extraordinario ocurrido durante unas obras civiles en el municipio alicantino de La Alcudia. Allí, el hallazgo en 1897 de una escultura perteneciente al periodo ibérico (IV y V siglos antes de Cristo) produjo gran conmoción a la pequeña población de unos doce mil habitantes… y al propietario de los terrenos, que obtuvo un importante beneficio al venderla al francés museo del Louvre, donde estuvo hasta que Franco convenció al general De Gaul para su retorno a España, primero al Museo Nacional del Prado y, finalmente, al Museo Nacional de Arqueología.
Ahora, 2.700 años tras la creación de La Dama y 126 del descubrimiento, cabe pensar que las gentes de La Alcudia pretendieran conservar su dama, hacerle un museo, exhibirla turísticamente… y conservar el nombre de ‘La dama de La Alcudia’. Todos sabemos que, afortunadamente, La Dama está donde le corresponde, en el Museo Nacional de Arqueología.
Podía haber conservado la denominación del lugar donde fue encontrada, pero la historia la ha denominado, para siempre, como ‘La dama de Elche’.
En el año 1988, en aguas de la provincia marítima de Cartagena, en la Comunidad Autónoma de la Región de Murcia, junto al municipio de Mazarrón (34.000 habitantes) un equipo de submarinistas-arqueólogos descubrió los restos de un navío fenicio del siglo VII (aC). Gran hallazgo que continuó con el proyecto ‘Nave Fenicia’ dirigido por el doctor-profesor don Iván Negueruela, a la sazón director del Museo Nacional de Arqueología Subacuática, sito en Cartagena, y uno de los contados museos nacionales ubicados fuera de Madrid.
Los restos del barco fenicio fueron ‘bautizados’ con el nombre de la población próxima: ‘Mazarrón I’ (no como les pasó a los pobres habitantes de La Alcudia con ’su dama’).
Más adelante, los submarinistas del proyecto ‘Nave Fenicia’ descubrieron otra nave…, ¡esta vez íntegra!, también denominada ‘Mazarrón II’. Fue cuidadosamente protegida con una ‘jaula metálica’ en tensa espera de su futuro, ya que su extracción acarrea grandes peligros de destrucción…
Como en su día, la Dama de Elche quedó-para siempre-en el Museo Nacional de Arqueología, en el caso de que los expertos permitan su extracción su destino habrá de ser el Museo Nacional de Arqueología Subacuática, junto a su ‘hermano’, el ‘Mazarrón I’.
La alternativa razonable es dejarlo donde permanece desde hace unos 2.700 años, protegido en su jaula y a la vista de barcos turísticos mazarroneros, de España y del mundo, ansiosos de contemplar el, probablemente, barco más antiguo del mundo.